La Bodega. Nociones básicas sobre el vino.


El vino es una parte muy importante en la confección o elección de un menú. Por lo tanto debemos
tener sobre él conocimientos al menos genéricos. Saber sobre vino se ha convertido en algo fundamental en muchos casos para el desarrollo de nuestra vida social. Ahora bien, no es necesario ser un experto y mucho menos parecerlo.  Recuerde que es posible que esa persona que realmente sabe de vino, no esté por ahí alardeando de sus conocimientos, así que es casi mejor que usted tampoco alardee de los suyos, sobre todo si no los tiene. Si es el caso contrario y nuestro lector sabe de que está hablando, tampoco trate de impresionar a su entorno. Es mejor que guarde sus amplios conocimientos para reuniones específicas donde la gente le de el mismo valor que usted y hablen todos el mismo idioma. No hay nada tan pedante como escuchar a algún entendido (da igual en que materia) hablando con todo lujo de detalles en un lenguaje que sabe que el resto no entiende y en la mayoría de los casos sin que nadie le haya pedido más información.   Desenvolverse con cierta soltura es suficiente.

 Las cuestiones más básicas son las siguientes:
• Por su color se sirven antes lo blancos que
los tintos.
• Por su edad se sirven los más jóvenes y luego los
más añejos.
• Por su sabor (cuerpo), primero se sirven los más
suaves (de menos cuerpo) y luego los más intensos
(de más cuerpo).
• Por su contenido en azúcar primero los secos y
luego los dulces.
• Al igual que el menú va ganando intensidad, los
vinos deben ir acompañando este incremento
de sabores más suaves a sabores más elaborados
o fuertes.
• Lo blancos suelen acompañar a los pescados y
mariscos. Los tintos a las carnes rojas. Los vinos
dulces a los postres, aunque algunos se sirven también como aperitivos.

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