El plátano

El plátano es una fruta original de Asia. Llegó a las costas del Mediterráneo en el año 650. y a Canarias en el siglo XV. Desde aquí se envió a América donde llegó en el año 1516. Decidieron cambiarle el nombre por banana y además lo convirtieron en uno de los alimentos básicos de los países  tropicales y caribeños. Los plátanos machos son los que utilizan para guisar, porque son menos dulces y más grandes, con ellos, acompañan casi todos sus platos. En cambio en Europa es más común que se consuman crudos y generalmente como postre. Es desde aquí, desde Canarias donde empieza a comercializarse a finales del siglo XIX.

Necesita de un clima cálido y húmedo para cultivarse perfectamente, por ello los principales países productores de plátanos son los países tropicales y caribeños de Sudamérica y en muchísima menos proporción, el sudeste asiático.

Los plátanos contienen un 75% de agua, hidratos de carbono, fibra y muchas calorías, pero son sin duda sus propiedades minerales las que lo hacen un elemento perfecto para deportistas de alto rendimiento, ya que contiene minerales tales como; potasio, cloro, magnesio, calcio o hierro. Pero no solo para ellos es buena nuestra fruta. Por el gran aporte vitamínico y calórico es indicada para los niños, mujeres embarazadas, mamás lactantes y personas mayores.

El plátano, fruta que podemos consumir durante todo el años, es protagonista de una gran variedad, pero las más consumidas son : Pequeña Enana (Canarias), Gran Enana (Canarias), Brier (Canarias) Gruesa (Canarias), Lacatan (Caribe Sudamericano) y Zelig (Israel)

Al comprarlos, debemos fijarnos que no tengan golpes ni demasiadas manchas marrones, ya que cuando hay muchas quiere decir que están demasiado maduros. Si se compran un poco verdes se pueden dejar en un lugar fresco y sin luz directa, hasta que maduren. Contrariamente a lo que pudiera parecer, no es malo guardarlos en la nevera. Veremos que su piel se pone marrón, pero a la fruta en el interior no le pasa nada. El plátano se puede congelar, manteniendo sus propiedades hasta dos meses. Así siempre podemos disponer de ellos y en algunos casos a modo de medicina ya que el plátano tiene propiedades beneficiosas para diarreas, es astringente, regula el tránsito intestinal, la hipertensión, la anemia, la gota, refuerza el sistema inmunológico, es beneficioso para los dientes y los huesos y previene el cáncer de colon.

Al margen de su historia, de sus propiedades y de  las distintas variedades, todos tienen algo en común: ¡Están buenísimos!